El primer vagón es el que condena al adicto. Esta es la historia de Giovanni Mascheroni, un hombre que bajó al averno del Bronx y que al final de su tragedia supo hallar la luz. Transmitir sensaciones reales puede ser uno de los objetivos más complejos al momento de generar contenido, más si nos basamos en la reconstrucción de vivencias no gratas de otras personas y de una sociedad. La Olla del Diablo es el resultado de horas de trabajo de un equipo creativo que convirtió una entrevista en una oportunidad para hablarle al mundo sobre el pasado de un par de calles del centro de la capital colombiana donde habitó el miedo, la zozobra, la drogadicción y la muerte: El Bronx. La intención de este trabajo es llevar un mensaje de esperanza y luz para aquellos que viven en el oscuro y crudo mundo de las drogas .Este corto documental recorre a través de los ojos de un protagonista estas cortas calles en forma de ‘L’ que lo vieron descender, ir al infierno, ver nuevamente el amanecer y hoy poder dar un testimonio útil a la sociedad, nuestra sociedad. (The Devil's Pot).